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Os vamos a dar algunos consejos y trucos para que la realización de un encaje para un abanico y el montaje de vuestro encaje de bolillos en las varillas del abanico sea todo un éxito.

 

 

Lo primero que debe hacer una encajera cuando quiere hacer un abanico es conseguir el varillaje.
Si hacemos el encaje y después buscamos el varillaje, en muchas ocasiones tendremos el problema de no encontrar uno que se adapte a las medidas de nuestro encaje.

En un abanico, tenemos que tener en cuenta dos medidas:
– La del Pais, o lo que es los mismo la zona de encaje.
– El diámetro interior.
Para que un patrón de bolillos se adapte a un varillaje, tienen que coincidir las dos medidas

Comienzo y final de un encaje para abanico de bolillos

Para empezar confeccionamos una tira a punto entero de donde saldrán todos los bolillos que necesitamos para trabajar el resto del abanico. De esta forma, colgamos del punto de empiece unos doce o catorce bolillos, y en cada alfiler de la parte interna de la tira colgamos los bolillos que nos pida el diseño para poder seguir el trabajo en este punto, como indica el dibujo.

Cuando llegamos al final de la tira, aprovechamos los bolillos para realizar los puntos de arriba. En el caso de este dibujo, tenemos que repartir los dieciséis bolillos entre las cuatro trenzas que rematan el trabajo

 

 

 

Remate de un abanico

En el remate, trabajamos el abanico hasta el final, y empleamos los últimos bolillos, en este caso los de las trenzas, para empezar la tira a punto entero. A medida que vamos avanzando en la tira, tenemos que incluir los bolillos que tenemos que rematar.

Haremos con ellos cuatro o cinco pasadas a punto entero y podemos ir eliminándolos para mantener un número de bolillos razonable en la tira.

Para el terminar, simplemente tenemos que echar los bolillos para atrás, para no incluirles en el punto siguiente.
Y una vez terminado el abanico, es suficiente con cortar los hilos a ras del punto entero. Como los hilos están tejidos, no se moverán. Cuando llegamos debajo de la tira a punto entero, damos unas cuantas pasadas más, dejando una pequeña cola, y rematamos los bolillos que quedan con nudo.
La parte que sobra se rematará detrás del encaje, fijándola con pegamento textil.

 

 

Para fijar el encaje al varillaje

Podemos utilizar cola blanca diluida en agua. Ponemos un cuenco con agua, otro con la cola, y mojamos un pincel primero en la cola luego en agua, y untamos la varilla del abanico con ello. Enseguida pegamos el encaje y con un papel de cocina, escurrimos lo sobrante.

En cuanto a la colocación de las distintas partes, abrimos al varillaje a la medida del encaje, fijamos con adhesivo la parte de abajo para garantizar la colocación correcta de las varillas a igual distancia, y empezamos con la cola para fijar en encaje sin que se muevan las varillas.

abanicos de bolillos

 

 

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